Apareciste en un momento
inesperado. Pero aún a día de hoy
estás formando plena parte de mi vida.
Llenaste todo el espacio vacío que
tenía mi alma. Me hiciste sentir la
felicidad y me llenaste de calma. Tu
compañía echo a faltar cuando
despierto por la mañana y tu amada
mía no estás al lado de mi cama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario